Devocional semanal: 26 de Abr. de 16
TIEMPO PARA CAMBIAR.
Hola, buen día.
En vive para cristo hemos
estado hablando del amor, el perdón, conocerse y ahora como siguiente punto,
hablaremos de identificar el problema y solucionarlo.
Un problema en nuestra vida
puede ser las relaciones interpersonales (noviazgo, familia, amigos) o la
dinámica que lleve respecto algo en la vida (universidad, trabajo, estudio). Así que cuando nos encontramos frente a
estas situaciones en las que sentimos que no podemos, que nos estamos agotando, antes de renunciar debemos tratar
de salvar y reconstruir.
Es entonces ¿cuándo se hacen
necesario que pasen cambios en nuestra vida? ¿Cómo hacer estos cambios? Por
medio de 4 ítems iremos hablando y conociendo distintas estrategias para hacerlo
e identificar la mejor solución.
1. Para florecer necesitas podar.
Si quieres ver flores nuevas en tu vida,
necesitaras podar la maleza de tu vida. Entonces para que inicien
buenos comienzos deben terminar los malos momentos. De manera que el
inicio y el fin siempre están juntos. Cuando algo acaba es porque cosas
nuevas están por iniciar.
Debemos pensar si nuestras
relaciones o dinámicas van acorde a lo que esperábamos o queremos. Eso si antes
analiza todo de ti, y mira si no están fluyendo las cosas por actitudes tuyas, ANTES
de pensar que sea la otra persona. Ahora si ya analizaste y comprendiste la
situación; si es de cambiar cambia, y si está en la otra parte ayúdala a llegar
al cambio.
Bien lo decía Jesús: Esto significa
que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La
vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha comenzado! 2 Corintios 5: 17 NTV. Entonces
debemos morir a ciertas cosas para vivir las nuevas. Este versículo no
solo nos habla que al aceptar a cristo en nuestras vidas somos nuevos porque
sentimos el perdón de nuestros pecados y somos conscientes de nuestros errores.
Sino que cosas nuevas tiene que pasar en nuestras vidas. De manera que si era
una mala hija ahora debo ser mejor, si era una mala amiga ahora debo ser mejor.
Porque el cambio que Cristo hace en nuestras vidas se notara en todo lo que
hacemos en ella.
Así que
debemos estar dispuestos a cambiar y al cambio.
2.
Conocer los indicadores que determinan un cambio.
Esto se aplica a cualquier cosa en nuestra vida,
hay 3 preguntas básicas que debo contestarme y si eso que quiero no es lo que está
presente o no se podrá obtener así como van las cosas, es momento de un cambio.
¿Qué quiero en mi futuro?
¿Cómo está mi inventario (positivos y negativos de
la situación)?
¿Esto es sustentable para mí?
Si estas preguntas no se contestan con facilidad,
entonces es momento de un cambio.
3.
Sabiduría para terminar una dinámica o relación.
Existen 3 formas de ver los problemas o relaciones
y cada una de ellas tiene una forma de llevarlas a una solución.
- Sabios.
Escucha el consejo y acepta la corrección, para que
seas sabio el resto de tus días. Proverbios 19: 20.
Estas es
una situación, persona o relación en la que las cosas últimamente no se estaba
dando bien, pero que se solucionan hablando y llegando a un acuerdo mutuo.
Por ejemplo que mi compañera de cuarto siempre deje las cosas regadas y eso
hace que me resbale cada vez que entro al cuarto. El primer día te reirás, los
siguientes días estarás acumulando frustración y enojo y algún punto
estallaras. Esto no es lo ideal lo mejor es HABLAR, entonces si hablas con ella
y llegas a un acuerdo y si esta persona es SABIA aceptara tu corrección y te lo
agradecerá y obviamente aplicara el acuerdo al que llegaron. Entonces no tendrás
que cambiar de habitación o vivir enojados.
Es de
sabios tener paciencia, y es más honroso perdonar la ofensa. Proverbios 19: 11
- Necios.
La lengua del sabio hace grato el conocimiento,
pero la boca de los necios habla necedades. Proverbios 15: 2
Este es el tipo de relación o dinámica en la que por más que hables nunca pasa
nada, es decir sigue en lo mismo. Es aquí cuando debes marcar límites y
consecuencias.
Supongamos que debes bajar de peso por salud y
sabes que debes hacer ejercicio y tener hábitos de vida saludables. Entonces
los primeros días vas bien y de repente te aburres y como sientes que no pasa
nada, dejas desatendida la situación. De repente tu cuerpo te pasa factura de
cobro y vez las consecuencias de no haber realizado las actividades.
Van a haber personas o como vimos en el ejemplo que
actúan de esta misma manera, que por más que hablemos o demos consejo no
cumplen con lo acordado o no realizan los cambios en la vida. Es entonces
cuando se deben poner límites y consecuencias. Es decir hablar y decir con amor
y sinceridad quiero en mi vida esto y tú no actúas bien así que quiero que
cambien y mejores y yo también lo hare y te ayudare si estas cosas no pasan lo
mejor es acabar.
Esto no solo ocurre con relaciones sino con dinámicas,
a veces aceptamos trabajos por no quedar mal, o estamos lo que no queremos y
sabemos que no debemos seguir porque no es lo nuestro. Eso se llama ser necesito
porque no debemos hacer lo que no nos sienta bien, ni actuar como no es nuestra
ética o moral. Así que déjalo y si haces
lo que realmente quieres seguro si veras el éxito, te sentirás bien y serás
feliz.
El camino
del necio es recto a sus propios ojos, más el que escucha consejos es sabio.
Proverbios 12: 15.
-
Súper necio.
Haz hablado, llegan a acuerdos que no se cumplen,
lo ayudas a cambiar y sin embargo sigue la misma situación. Es momento de dejar
a un lado a esta persona y que siga su camino. Cuando queremos no dejaremos que
cosas malas les pasen por eso le advertimos, aconsejamos. Sin embargo lo que
mejor funciona es que la vida los golpee y aprendan de la adversidad.
Cuando se aprende de la adversidad esa lección nunca
se olvida y realmente aplicamos eso que nos enseñó la vida. Así que cuando esta
persona o situación pase, te sentirás o se sentirán como el hijo prodigo que
regresa. Ya no serás o serán inmaduros, sino personas más sabias.
4.
El luto es necesario para experimentar la resurrección.
Es asumir la perdida respecto a algo que ya no está
en nuestras vidas. Es el momento de dejar ir las cosas.
Las cosas son buenas mientras duran, luego ya no. Todo no
es para siempre como vez en la vida consta de etapas, eres bebe, niño,
adolescente, adulto, anciano. Siempre son etapas, estas en el colegio, luego la
universidad, trabajas, cambias de trabajo y luego descansas.
De manera que situaciones como las relaciones
algunas de ellas serán etapas de la vida y que siempre se deben recordar como
un buen momento, porque hizo parte de nuestra experiencia
humana y aprendimos cosas.
Muchas de las cosas y personas que se quedaran
definitivamente en nuestra vida, Debimos conocer varias para identificar qué
cosas o personas queremos para siempre.
Necesitamos del luto. Es decir llorar, comprender que eso no está más. Para que cuando empiece todo nuevamente porque de tras de cada final hay un inicio, identifiquemos que queremos o no. Sino seguiremos trayendo a nuestra vida las mismas cosas que no queremos.
Hay un
tiempo para todo
3 Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo
para todo lo que se hace bajo el cielo:
2 un tiempo
para nacer, y un tiempo para morir; un tiempo para plantar, y un tiempo para
cosechar;
3 un tiempo para matar, y un tiempo para sanar; un
tiempo para destruir, y un tiempo para construir;
4 un tiempo para llorar y un tiempo para reír; un
tiempo para estar de luto, y un tiempo
para saltar de gusto;
5 un tiempo
para esparcir piedras, y un tiempo para recogerlas; un tiempo para abrazarse, y
un tiempo para despedirse;
6 un tiempo
para intentar, y un tiempo para desistir; un tiempo para guardar, y un tiempo
para desechar;
7 un tiempo
para rasgar, y un tiempo para coser; un tiempo para callar, y un tiempo para
hablar;
8 un tiempo
para amar, y un tiempo para odiar; un tiempo para la guerra, y un tiempo para
la paz.
Eclesiastés 3: 1 – 8
Se volverán a repetir esas situaciones que no
queremos pero seremos valientes para impedir que sucedan. También cuando
terminamos una relación con alguien (amistosa, laboral, amorosa) no debe ser
malo, es cierto ambos irán caminos y sentidos diferentes, pero si se encuentran
no deben de tomar un atajo o ignorarse, mejor reírse y recordar lo momentos buenos.
Bendiciones.
