Agosto

Confía en lo que Dios puso en tu corazón.

12:49 p.m.

Devocional semanal: 7 de agosto de 2016.

Confía en lo que Dios puso en tu corazón.



Hola, buen día.

No se han hecho la pregunta ¿Por qué hago esto? Esta pregunta cabe para todo (Estudio, trabajo, deberes) cuando solemos hacernos esta pregunta es porque no estamos cómodos con alguna situación particular y especial porque no se cumple alguna expectativa tan esperada.
Para evitar situaciones como estas, siempre que vayas a realizar algo, pregúntate:

·        ¿Cuál es el propósito de la acción?
·        ¿Qué ganarías con eso?
·        ¿Cuántas personas se benefician?
·        ¿Si preguntaran por eso a 10 años te sentirías orgulloso?
·        Pero lo más importante ¿agrado a Dios con esto?

Tal vez falten algunas preguntas hagan falta por realizarse, debido a que cada circunstancia que enfrentamos a diario es diferente y exigen distintas cosas de nosotros. Lo cierto es que estamos llamados a vivir una vida con PROPÓSITO y no debemos estar tomando decisiones aceleradas, sino más bien acertadas.

Ahora si te equivocas no hay problema, alégrate de los errores. Un error nos muestra una debilidad que debemos reforzar. Así que tanto en lo bueno como en lo malo nos gozamos de todo lo que nos pase tanto acertado como no, aprendemos siempre algo.

Hay algo que me ayudado a disfrutar mi vida un poquito más y es reírme de lo que me pasa a diario, tal vez en el momento crítico no lo hago, pero si me detengo y digo: “por esto no se me va a dañar el día” No la paso mal.
El observador decide como ver el paisaje, ¿Cómo quieres ver tu vida?

Antes de comenzar ten un momento a solas con Dios, agradécele por todo lo que tienes y pídele a que te ayude a ver de una manera acertada la vida.

11» Cuando los hagan comparecer ante las sinagogas, los gobernantes y las autoridades, no se preocupen de cómo van a defenderse o de qué van a decir, 12 porque en ese momento el Espíritu Santo les enseñará lo que deben responder.» LUCAS 12: 11- 12 NVI.

Es común que estemos en situaciones en la que debamos responder o comparecer ante los demás y justificar los actos que realizamos, de hecho, todos tendremos un juicio delante de Dios, pero escrito esta con la vara que mides serás medido.

Lo que no enseña este versículo es a tener confianza de nosotros mismo cuando estemos frente a autoridades y estemos seguro de la obra que hemos realizado, más si esta fue a favor de Dios, porque será el quien te de las palabras para responder.

Por ejemplo, había una vez un contador que debía entregar el informe final de 
la empresa, el auditor quería falsificar el documento y culparía al contador del robo. El dueño de la empresa cuando se enteró los mando a llamar a los dos y le dijo: - ¿Quién de ustedes cometió el fraude? O ¿fueron los dos?

El contador ni siquiera sabía lo que pasaba y por eso estaba tranquilo a lo que respondió: Yo sé muy bien lo que hago en mi trabajo, puede usted tomar mi oficina ahora mismo y revisar hoja por hoja y también revisar mi computador, o correo sé que no he hecho algo malo.

En cuanto al auditor se mostraba ansioso y decía: ¿Cómo es posible que me tengan en esta situación? Yo soy un auditor así que el culpable es el contador

El jefe al ver la actitud de ambos hizo como el contador pidió y no encontraron ningún error al entrar en la oficina del contador. Pero en la del auditor notaron el documento enviado por el contador y nuevo documento que había realizado el auditor para cometer el robo.

El auditor fue despedido y contador paso a ser el auditor. Su Jefe le realizo una pregunta: ¿Por qué no te alarmaste? Y el respondió:

Todo lo que hago, lo hago como si fuera para Dios. Así que debe ser perfecto, estaba tranquilo porque no haría algo que diera mal testimonio de mi fe y confió plenamente en mi Señor, aparentemente yo era el culpable, pero Dios puso en mí las palabras perfectas para que usted viera donde estaba el error.

Confiemos en lo que Dios ha puesto en nuestros corazones. De la abundancia del corazón habla la boca y el corazón está lleno de los pensamientos y acciones que realizamos. Por más difícil que parezca las circunstancia si hemos actuado bien, bien saldremos de todo.

Bendiciones.



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