El Ayuno.
Hay muchas maneras de conocer a Dios, por parte de tus padres, amigos o familiares. Algunos te habrán realizado una invitación a su congregación religiosa, otros te habrán compartido de su experiencia con Dios o algún fragmento de la biblia, o viste un anuncio en Internet, televisión o radio. La finalidad de todas estas formas es darte a conocer de un Dios que existe, que te ama, desea lo mejor para ti y siempre te protege.
La invitación de hoy es que devuelvas la obra que hicieron en ti, comparte tu experiencia, invita, ora por otras personas, se hacedor de la palabra y da a conocer a Dios.
Antes de iniciar tomate un tiempo a solas con Dios, pídele que te edifique en medio de la palabra.
El ayuno
16 »Cuando ayunen, no pongan cara triste como hacen los hipócritas, que demudan sus rostros para mostrar que están ayunando. Les aseguro que éstos ya han obtenido toda su recompensa. 17 Pero tú, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara 18 para que no sea evidente ante los demás que estás ayunando, sino sólo ante tu Padre, que está en lo secreto; y tu Padre, que ve lo que se hace en secreto, te recompensará.
Mateo 6: 16 - 18 NVI
3 herramientas principales existen para una verdadera relación y comunicación con Dios, la oración, el ayuno y la lectura de la palabra. El ayuno es un momento en el que te dedicas a concentrar tus energía, pensamientos, oracional y tiempo con Dios, para clamar por algo que anhelas, pedir respuestas, agradecer. El ayuno es demostrar que aunque nuestra debilidad humana nos lleve a necesitar cosas de este mundo nuestro amor por Dios nos fortalece.
La biblia nos da muchos ejemplos de ayuno por ejemplo Daniel ayuno por clamor a Jehova comiendo solo frutas, Jesús no tomo alimentos en 40 días que estuvo en el desierto. Todo esto porque su alma estaba concentrada en Dios, no importo el hambre o las cosas que tenían que hacer estaban seguros que si disponían su alma y doblegaban su orgullo ante Dios encontrarían esa respuesta que estaban buscando.
Realizar un ayuno es un arma poderosa para ,mejorar nuestra comunicación con Dios. Ese momento que dedicas solo para el, en el que le escuchas, le hablas, soportan tu relación. Renueva tus fuerzas y te aviva.
Reflexión
Recuerda por lo que corres, y al lado de quien corre. Pero como en toda relación se necesita dedicar tiempo y el ayuno es una opción.
Bendiciones.
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